El simbolismo de los casinos en los pueblos de la sierra es indudable. Son muchos años de acoger el tiempo de muchos serranos que han dejado en ellos buena parte de sus vivencias. Este significado es el que recoge un nuevo producto cultural que va a presentar la Asociación Cultural Lieva dentro del ciclo “Las Tardes de Sierra Luz”, programación sociocultural del Hotel Rural Sierra Luz de Cortegana.
Se trata del número cinco de su revista “Rumor de Aguas”, titulado “Casinos de la Sierra”, que incluye una disección de algunos de los establecimientos de la comarca. La obra ha sido escrita por Miguel López Mojarro, que atesora una larga trayectoria como profesor, sociólogo y educador. Con más de quince publicaciones y una larga nómina de artículos en revistas especializadas, este investigador ha realizado un recorrido desde el punto de vista sociológico por los casinos serranos que, aunque breve por la extensión de la revista, ofrece trazos fiables de su verdadero significado.
En un estilo narrativo y con personajes inventados, aunque extraídos de la realidad de cada lugar, López Mojarro nos acerca sentimientos como la convivencia, la amistad, los tiempos perdidos pero siempre fructíferos, la distinción de sexos y clases sociales, los juegos y tantos ratos de unión indisoluble entre hombre y lugar.
El autor incluye entre los casinos estudiados a los más señeros de la zona, entre los que añade alguno ya clausurado, como el de Galaroza, dejando otros para un estudio posterior más amplio. Porque el texto es un avance de una obra que está ejecutando junto al grupo Evaluación y Proyectos, centrado en la historia y las tradiciones de los casinos de toda Andalucía.
La Asociación Lieva le ofreció extractar un primer capítulo dedicado a la comarca serrana y el resultado es este nuevo número de la revista “Rumor de Aguas”, recuperada por Lieva hace un par de años en los que ha pasado revista a temas tan interesantes como el humanista Diego López de Cortegana, la historia del fútbol a través del Club Deportivo Cachonero, los últimos lobos de la sierra o sus molinos harineros.
